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En entrevista con la Agencia Informativa CONACyT, México
El doctor Jesús Jasso Méndez, miembro de la Academia Mexicana de Lógica, platica con la Agencia Informativa CONACyT, sobre las actividades que se realizarán en el XlX Encuentro Internacional de Didáctica de la Lógica (EIDL) y el 6º Simposio Internacional de Investigación en Lógica y Argumentación (SIILA), del 15 al 18 de noviembre de 2016, en la Casa Universitaria del Libro, UNAM. Para conocer el programa dar clic aquí.
Cine independiente en México: Jacaranda Correa
Por Ricardo Ariza
Difícil establecer una breve biografía de la cineasta mexicana Jacaranda Correa, sin cometer alguna omisión respecto a la amplia e interesante trayectoria. Desde su desempeño en la televisión cultural en Canal 22 como reportera, productora y conductora, así como su trabajo periodístico –y en el papel de directora de cine documental–, sus temas la han destacado como creadora de contenidos humanísticos: Identidad, cuerpo y género: conflictos y violencia de géneros, masculinidades. Derechos humanos, libertad de expresión.
Actualmente dirige para la televisión cultural de México la barra de documentales Visión periférica en Canal 22. Es directora de la productora independiente Sirena Films, el sello que la distingue.
Como directora logró –con su opera prima– ganar el Festival Internacional de Cine en Guadalajara 2011. El largometraje documental Morir de Pie (2010) de 80 min, fue también nominado al Ariel en 2012 y recibió reconocimientos en diversos festivales internacionales.
De esta obra ganadora nos dice: “A través de distintos formatos: entrevista, material de archivo y el cine observacional, Morir de Pie construye el crudo retrato de un luchador social que se aferra a la vida creando su propio personaje, un Che Guevara a la mexicana, decidido a pelear por su dignidad al reconocer desde muy niño que una enfermedad degenerativa lo dejará postrado de por vida en una silla de ruedas. Años más tarde, al filo de la muerte y convencido de su deseo por el cambio, decide emprender una revolución personal para dar paso a la mujer que siempre llevó dentro. Es el juego de una metáfora a través de la cual podemos comprender que si bien, la vida es una derrota porque todos vamos camino a la muerte desde que nacemos, es también una historia que reivindica la lucha por el sentido de la vida y por la identidad, por el amor incondicional y la dedicación absoluta. La historia de un hombre de convicciones ideológico-revolucionarias que, una vez enfermo, inicia su propia lucha, junto a su compañera, para convertirse en mujer”.
En 2011 cuando un jurado internacional le dio el Mayahuel como mejor documental mexicano en el festival de cine de Guadalajara, en el acta de premiación quedó asentado: “Por ser una historia de coherencia, lucha y compromiso con la vida, el amor y la identidad más íntima del ser humano en el contexto de las contradicciones de nuestro tiempo”.
Jacaranda Correa estudió periodismo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, es Maestra en Sociología Política por la Universidad de la Sorbona de París. Ha tomado diversos cursos y talleres de dirección cinematográfica. Como periodista por más de 20 años trabajó en Televisa, Canal Once, Telemundo y Canal 22, Milenio diario y Milenio revista semanal. Ha sido Conductora y Directora editorial de tres programas de investigación periodística en Canal 22: Ventana de medianoche, Espacio Alterno y El Rotativo.
Emprendedora desde siempre, el cine documental la escogió a ella: buscó primero su camino en la actuación y como pianista. La experiencia directa con los actores de diversos hechos sociales la llevó a tomar la cámara para contar las historias de personajes que viven en los distintos territorios de Ciudad de México: “Rompen todos los conceptos que puedas tener sobre la identidad”, dice.
Jacaranda Correa obtuvo el premio de derechos humanos Rostros de la discriminación por la serie de cuatro grandes reportajes Secuestro de migrantes centroamericanos en 2007. También obtuvo el premio Pantalla de Cristal, por mejor edición de Anxie, retrato de un travesti heterosexual en 2004; fue merecedora a la Medalla Humberto G Tamayo, otorgada por la Asociación Nacional de Locutores, por su contribución social y cultural en la TV pública por el programa El Rotativo. Ha dirigido cuatro documentales y ha producido tres para la televisión.
Los próximos proyectos fílmicos de Jacaranda Correa son Muerte en casa, una perspectiva del feminicidio en México –desde el punto de vista del victimario–. Y El viaje, un documental que explora la vejez y la proximidad con la muerte de la escritora mexicana Elena Poniatovska.
Actualmente dirige uno de los proyectos más ambiciosos de su vida. Produce y dirige un laboratorio de experimentación digital LAB22. Es una suerte de minicanal, una plataforma de contenidos interactivos cuyo invitado central es el nuevo documental, pero trabajándolo desde territorios al límite: “Vamos a contar historias a partir de las nuevas narrativas digitales y con los nuevos formatos web”.
“En el mundo suceden cosas terribles. Por eso hoy comunicar exige un esfuerzo constante de sensatez, distancia, de criterio para abrir un terreno de diálogo, plural y realmente humano, que nos preserve del hecho trivial”.
Ricardo Ariza, mexicano, es escritor y editor. Ha publicado el libro de poemas El título es consecuencia del azar (Colección El Ala del Tigre, UNAM, 1996). Y Física de cuerpos ausentes (Colección La Hogaza /5. Instituto de Cultura de Morelos, 2009). Así como la antología personal En donde la memoria arda (INBA, CONACULTA, Editorial Eternos Malabares, 2013). Es compilador de la Antología de cuentos latinoamericanos editada por SelloImpreso 2014; autor del manual Maíz. El sustento que da la vida. Es colaborador de la revista francesa El Café Latino.
José Santos: A Mexican Artist in the United Kingdom
By Eduardo Estala Rojas
The Mexican artist José Santos (Oaxaca, 1971) arrived in London in 1997 to study art at the University of Worcester. In this exclusive interview, he tells us that he has travelled to many parts of the world and that he received a royal invitation when his work was selected for the inauguration of The Hive, Worcester’s public library. ‘The library was inaugurated by England’s Queen Elizabeth and Prince Philip and my work was part of this special event,’ Santos recounts.

The Mexican artist José Santos. Photograph: Mexican Cultural Centre (MCC), United Kingdom.
Santos currently works for the renowned Museum of Royal Worcester. ‘Historically it is a very important place in terms of country’s ceramics and design. Part of the collection consists of design books, drawings, paintings and ceramics. It also maintains a collection of copper plaques with exquisite engravings, dating from the 18th century until present day.’
‘I contribute to the rescue of these designs, many of which now need restoration rather than just cleaning; unfortunately, some are now beyond repair. Their restoration is very important as the designs end up being part of table pieces for the world’s royalty, so you can begin to imagine their quality, technique and artistic worth. It is an honour to participate in the recovery of the first series of 10 engravings,’ Santos explains.
In his opinion, the art made in the United Kingdom is amongst the best in the world. ‘Here you find a selection of political, controversial, aesthetic, surreal, classic and contemporary art created using different, innovative artistic media. I have had the opportunity to travel around Europe and other parts of the world. In the United Kingdom one finds a great diversity of cultures, theories and philosophical approaches by artists from all around the world that come to settle in this country, making this an exceptional place.’
He also says that to make artistic investigations pushes you to explore, travel and read: ‘Not only in search of truth, but also to discover a unique world that you have created. Why? Because it’s here where you reason, it’s here where you doubt and form your own concepts. To be an artist you should be original and find yourself through the process of doubts and answers within your mental capacity and then convert it into the best medium that you know how.’
He reflects on how he got involved in artistic practice: ‘Ever since I was little, the smell of paper, chalk or any material has been a way to communicate a moment of imagination and creativity that naturally passes through the mind. The walls of my room were my first canvases and they also resulted in my first lessons of punishment. Throughout my years in education I was in the bottom of the class; I never spoke or participated. But my notebooks were always filled drawings of my classmates’ profiles.’
He says that the artists who inspire him are María Izquierdo, Rufino Tamayo and Diego Rivera. ‘Mexico offers impressive artistic talent. It has a very rich historical and artistic culture and as a Mexican I feel privileged to have been born into a land full of inspiration.’
His work has been exhibited in Mexico and the United Kingdom, in books, museums, galleries, and public spaces, including advertisements for products. ‘I want to think that the power of exhibiting in this country is part of my contribution to Mexican art. What I would love is the opportunity to share and take back this knowledge and these experiences to Mexico. I give talks at the Museum of Royal Worcester about engravings and why they emerge in different periods and influences,’ José Santos adds.
He urges Mexican artists to work hard, ‘to value their work and exhibit it, while being critical of themselves, which is very important. There is a lot of inspiration to be had from great artists, from nature, from the unnatural. However, one must know how to make a positive change in one’s artistic philosophy, and that only emerges with experience. So go forward and do not be afraid to experiment with other artistic media,’ concludes Santos.
Translated to English by Ellen Donnison.
Eduardo Estala Rojas is a Mexican poet, journalist and cultural advisor. He has worked as a correspondent in different posts for various international press agencies, as well as a critical and cultural consultant specialising in Mexico, the United States and the United Kingdom. He has obtained international awards and acknowledgement for his cultural and artistic labour. He is founder and director-general of the Mexican Cultural Centre (MCC), United Kingdom.
Paralibros: una opción gratuita para leer en Guanajuato capital
Eduardo Estala Rojas
“A diferencia de otros programas que van dirigidos al turismo, Paralibros tiene audiencia guanajuatense, principalmente infantil. El turista se acerca y toma una fotografía, pero raras veces se queda a leer. Las personas de Guanajuato poco a poco, a medida que lo conocen se involucran más y se dan un momento para disfrutar de la lectura”, señaló Verónica Cortés Sandoval, mediadora de lectura de Paralibros, en Guanajuato capital.

Verónica Cortés Sandoval, mediadora de lectura de Paralibros; Gema Pérez Rojas, lectora y estudiante de quinto año de primaria. Foto: Eduardo Estala Rojas.
Paralibros forma parte del Programa Nacional Salas de Lectura en México. Desde el 2011 está funcionando su stand en el emblemático Jardín Reforma. Es una opción gratuita que tiene como objetivo principal la promoción de la lectura en espacios abiertos como parques o jardines, lugares que facilitan el encuentro de las personas. Los tres elementos más importantes son los usuarios, los libros y el mediador.
“En el espacio algunas veces hacemos círculos de lectura improvisados con los niños que se acercan, lecturas en voz alta, actividades que promueven el diálogo y el respeto a las ideas diferentes”, agregó la licenciada en Cultura y Arte por la Universidad de Guanajuato, generación 2006-2010.
El mediador de lectura es un puente entre el libro y el lector, ya que “es una gran responsabilidad porque tenemos que tener la capacidad para hacer recomendaciones según las necesidades del lector. Creo que lo que más me motiva es interactuar con personas de diferentes edades y distintas ideologías. Eso me permite enriquecer y abrir la mente a las posibilidades que tiene el ser humano. Me siento muy agradecida por estar en ese espacio; y por supuesto la lectura me motiva a seguir creciendo profesionalmente”, añadió la mediadora de lectura.
“Inicié formalmente con las prácticas profesionales en las galerías de arte de la Universidad de Guanajuato. Ahí formaba parte del equipo de servicios educativos; estábamos encargados de organizar talleres y visitas guiadas al público general, especialmente a estudiantes de primaria, secundaria y preparatoria. En el 2013 fui asistente de la Lic. Adriana Camarena en el espacio cultural MAZ+AHUA en Casa Cuatro, ahí realicé trabajo de gestión y promoción cultural para eventos culturales, talleres, conciertos y exposiciones”, comentó sobre sus inicios en el área cultural y artística.
Los libros más consultados en el stand de Paralibros del Jardín Reforma son “El pato y la muerte” de Wolf Erlbruch, “Sapo enamorado” de Max Velthuijs, “Fernando furioso” de Hiawyn Oram y Satoshi Kitamura, “Siete ratones ciegos” de Ed Young, “Rimas y leyendas” de Gustavo Adolfo Bécquer, y “La vuelta de tuerca” de Henry James. La edad promedio de los lectores de Paralibros en Guanajuato capital son entre 5–11 años (mayor asistencia 50%), 25–50 años en adelante (mediana asistencia 35%) y 12–24 años (poca asistencia 15%).
México tiene el estigma de ser un país con pocos lectores; sin embargo, Paralibros está en plazas públicas de libre acceso, este programa propone que los transeúntes opten por pasar su tiempo libre, o mientras están a la espera de su cita y ocupen su tiempo con un libro. Así lo que era una distracción se convierte en un hábito. “Hay personas que no tienen recursos económicos para comprar un libro, algunos son muy costosos. Paralibros es una opción gratuita para aquellos que no tienen las posibilidades monetarias”, indicó la promotora cultural.
Además compartió algunas de sus experiencias como mediadora de lectura: “aún hay niños que se sorprenden con las pequeñas cosas, que no le temen a la imaginación, que pueden regresar a un mismo libro una y otra vez, no se cansan de “exprimirlo”. Es una gran enseñanza para mí. Otra buena experiencia, es que algunos adultos son reservados y llegan apenados por haber dejado la lectura una larga temporada o por no tener el hábito, pero cuando se dan cuenta de que nadie es juzgado y que al contrario los mediadores estamos ahí para apoyar en lo que podamos, resultan ser ávidos lectores”.
Sus libros favoritos de Verónica Cortés Sandoval son “El luto humano” y los relatos como “Dios en la tierra” y el “El sino del escorpión” de José Revueltas, “Bestiario” de Juan José Arreola, “Estas ruinas que ves” de Jorge Ibargüengoitia y los poemas de Efraín Huerta. Aconseja a los lectores que disfruten y no lean por obligación, imposición o una estadística para presumir. “Deben de tomarse el tiempo para disfrutar el libro sin distracciones, conversar con el texto, hacer anotaciones de lo que les parezca interesante, usar un diccionario para aclarar las ideas, conversar con alguien más y compartir la experiencia”.
Todos son bienvenidos para leer en el stand de Paralibros del Jardín Reforma, en donde cuentan con la opción de préstamo a domicilio. Para ello requieren la credencial IFE o INE y un comprobante de domicilio. También necesitan llenar un formato muy sencillo. El préstamo a domicilio es de un libro por ocho días. Los horarios son de martes a viernes de 16-19 hrs., sábado de 10-14 hrs., y domingo de 11-15 hrs. Para mayor información, escribir por favor a: verocortes.sandoval@gmail.com
Eduardo Estala Rojas, mexicano, fundador y director general del Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido. Contacto: mexicanculturalcentre@gmail.com
Premio Internacional Ana María Agüero Melnyczuk a la Investigación Periodística 2015
Publicamos en exclusiva el trabajo de investigación periodística ganador: «La importancia de visitar y promover las bibliotecas públicas, el español y las lenguas indígenas de México, en el extranjero», de Eduardo Estala Rojas, fundador y director general del MCC. El jurado internacional estuvo integrado por los profesores Laura Broitman (Israel), Marta Cantero Lleó (España), Juan Jacobo Melo Fierro (Ecuador). Este premio es organizado cada año por la prestigiosa Limaclara Ediciones en Argentina.
En las bibliotecas públicas y universitarias de México, Estados Unidos y Reino Unido, he tenido el privilegio como lector de poder acceder a valiosos acervos, protegidos y disponibles para llevar a casa, o consultarlos en los recintos y de forma digital. Dentro de estos lugares de sabiduría y conocimiento universal, han surgido reflexiones sobre la situación actual de México, mi país de origen, sobre la importancia de visitar y promover las bibliotecas públicas, el español y las lenguas indígenas de México, en el extranjero. En este reportaje periodístico, me enfoco en cinco apartados: La importancia de la lengua española y lenguas indígenas, encuestas sobre lectura y bibliotecas en México, entrevistas exclusivas, retos de los medios de comunicación en la promoción de la cultura mexicana, y reflexiones finales.
La importancia de la lengua española y lenguas indígenas
Carlos Prieto, en su libro “Cinco mil años de palabras: comentarios sobre el origen, evolución, muerte y resurrección de algunas lenguas[1]”, escribe: “El año de 1492 tiene una importancia fundamental no sólo en la historia mundial sino en la historia y evolución de las lenguas. Destacaré cuatro hechos capitales: la toma de Granada, que marca el fin de ocho siglos de dominio árabe en España; la llegada de los españoles a América y, con ello, el principio de la expansión de la lengua española al continente americano y la incorporación de palabras provenientes de lenguas indígenas; la expulsión de los judíos de España y el origen de la lengua judeo-española, y la publicación de la primera gramática del castellano por Antonio de Nebrija (Nebrija era andaluz y su obra es un reconocimiento del castellano como lengua de España. Se trata de la primera gramática de cualquier de las lenguas romances)”.
Según el Instituto Cervantes de España: “México es el país con el mayor número de hispanohablantes en el mundo 112.336.538” (“El español: una lengua viva. Informe 2012”).[2] Asimismo, México cuenta con 11 familias lingüísticas dispersas en todo el territorio, de estas se desprenden 68 lenguas y 364 dialectos, de acuerdo con el “Catálogo de las Lenguas Indígenas Nacionales”, hecho por el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI), [véase la infografía de Notimex como un complemento].[3]

En México viven 16 millones de indígenas de los cuales, menos de siete millones hablan su lengua madre y el número sigue descendiendo. Esta situación pone en peligro la existencia de los distintos dialectos utilizados en el país. Fuente: Notimex.
Desde el 2013 funciona el Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido [4], primer centro virtual de su tipo en la divulgación de la cultura mexicana en el extranjero. “El Mexican Cultural Centre (MCC), tiene que ver con la creación de un espacio comunitario entre la cultura mexicana e hispanoamericana y la cultura escrita en inglés en los Estados Unidos y en Gran Bretaña. No sólo viene a llenar un vacío sino que también ennoblece la presencia de la cultura hispánica en las redes sociales y permite un mejor conocimiento entre las culturas de origen hispánico y de otras lenguas”, indicó Adolfo Castañón, miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua. Cabe señalar que la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuenta con 11 centros de estudios mexicanos, ubicados en Francia, España, China, Canadá, Costa Rica, Estados Unidos (San Antonio, Chicago, Los Ángeles, Seattle, Tucson) y Reino Unido. [5]
Encuestas sobre lectura y bibliotecas en México
En palabras de Ernesto García Canclini, profesor-investigador distinguido de la Universidad Autónoma Metropolitana de México: “Según el Conteo de Población de 2005, efectuado por el INEGI, 92.1% de los mexicanos mayores de 12 años saben leer. La Red Nacional de Bibliotecas Públicas, uno de los equipamientos culturales que más ha crecido en las dos últimas décadas, cuenta con 7,210 bibliotecas, distribuidas en los 31 estados y el Distrito Federal de modo más equitativo que los teatros, los museos y las computadoras. De hecho, algunos de los estados con mayor porcentaje de bibliotecas por cantidad de habitantes, como Tabasco, Tlaxcala y Oaxaca, se hallan entre los que presentan menores índices de lectura”. [6]
En un nuevo informe, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), presentó en el Módulo de Lectura (MOLEC), México, 2015, lo siguiente: “En cuanto a la asistencia a lugares donde se puede acceder a material de lectura, el mayor porcentaje lo registraron las personas que acudieron a la sección de libros y revistas de una tienda departamental, en segundo lugar se encuentran las personas que fueron a una librería, en tercer lugar las que acudieron a un puesto de libros o revistas usados y el menor porcentaje se registró en personas que fueron a alguna biblioteca en los tres meses anteriores a la fecha de levantamiento, que se realizó los primeros 20 días del mes de febrero”. [7]
MOLEC lo realizó con base en la “Metodología Común para Medir el Comportamiento Lector”, publicada por el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (CERLALC), organismo intergubernamental auspiciado por la UNESCO. “De ahí que las estadísticas e indicadores resultantes, sean comparables con los de países iberoamericanos, lo cual permite establecer similitudes y divergencias”. MOLEC recabó la información entre la población mexicana de 18 años en adelante, en 2 mil 336 viviendas asentadas en zonas urbanas de 32 ciudades con 100 mil habitantes y más.
Entrevistas exclusivas para este reportaje periodístico

Daniel Goldin, editor y ensayista, director de la Biblioteca José Vasconcelos, México. Foto: ALR / Conaculta.
Daniel Goldin, director de la Biblioteca José Vasconcelos en México, considera necesario repensar las bibliotecas como espacios públicos destinados no sólo al resguardo del saber, “sino encaminados entre muchas otras cosas al reconocimiento de la diversidad de ellos y potenciar la apropiación cultural en su sentido más amplio, que no está forzosamente relacionado con los libros”. El también editor y ensayista señaló que actualmente la Biblioteca José Vasconcelos[8], se ha convertido en el cuarto recinto cultural más visitado del país, después de Teotihuacán, Chichen Itzá, y el Museo de Antropología, y la tercera más seguida de todas las bibliotecas iberoamericanas en redes sociales.

Adolfo Castañón, editor y traductor, miembro de la Academia Mexicana de la Lengua. Foto: Jorge Dávila, Icoavs, AML.
Adolfo Castañón, quien trabajó como editor y gerente editorial por casi tres décadas en el Fondo de Cultura Económica, declaró que en México y en general en los países de la región hispanoamericana: “la biblioteca no sólo es el espacio donde se encuentran los libros, sino que es un ámbito donde se puede dar algo intangible y precioso: la posibilidad de silencio y de concentración”. Además comentó que es importante dar más capacitación y apoyo a los bibliotecarios y a los que trabajan ahí. “Creo que lo esencial es que mejorara en la sociedad la percepción pública de lo que significan las bibliotecas y los libros. Si se hiciese un examen de evaluación de conocimientos a los candidatos a puestos de elección popular, quizá las bibliotecas se llenarían más. Un ejemplo admirable de biblioteca en México es la Biblioteca José Vasconcelos dirigida actualmente por Daniel Goldin”. Asimismo, recordó el poeta y traductor, una experiencia que lo marcó en su vida: “De niño, tenía la posibilidad de enterrarme en el fondo reservado de una biblioteca. Un día se fue la luz y nos quedamos mi hermana y yo encerrados en ese ámbito oscuro y habitado por alimañas y roedores. Logré salir de ese fondo reservado gracias a que observé el sentido en que iban las escaleras corredizas. Esa experiencia, para mi dramática, me ha acompañado toda la vida y me ha enseñado que la oscuridad puede ser vencida literalmente por la luz de la observación y la auto-observación”.
Gerardo Cárdenas, periodista y escritor, expresó desde Chicago, Illinois, Estados Unidos, que el incendio que destruyó la Biblioteca de Alejandría, o el que destruyó la biblioteca-laberinto del monasterio que crea Umberto Eco en “El nombre de la Rosa”, son buenas metáforas o alegorías para hablar de la fragilidad de la biblioteca. “Las bibliotecas, hoy en día, enfrentan retos enormes: la gente ya no lee, ni promociona la lectura entre sus hijos; la disponibilidad de textos, documentos, libros, imágenes y otros archivos en formato digital al alcance del teclado del teléfono o de la computadora alejan a la gente de la biblioteca; y las constantes privatizaciones y desincorporaciones a niveles gubernamentales tanto locales, como nacionales, descapitalizan a los propios gobiernos que deben priorizar sus escasos recursos, retirando apoyos a bibliotecas y otros programas culturales. Las bibliotecas tienen que recurrir a un gran despliegue de creatividad: programar eventos, organizar círculos de lectura para familias y niños, digitalizar su acervo para facilitarlo a través de sus páginas web a miembros registrados, sacar los libros del recinto para llevarlos por la ciudad y por barrios pobres en unidades móviles. De forma creciente, y para poder sobrevivir, quienes dirigen bibliotecas deben también desarrollar planes de mercadeo y comunicación tradicional y digital para ubicar a sus instituciones en la competencia por llamar y atraer la atención del público. La biblioteca no puede seguir aislada del mundo y de la comunidad, y tiene que hacerse presente casi de la misma manera que lo hace un restaurante, un gimnasio o una sala de cine: competir por clientela, por visitantes y por usuarios”.
Benjamín Pacheco López, reportero y escritor, comentó desde Ensenada, Baja California, México, acerca del valor de las bibliotecas, y el porqué debe existir la opción de la lectura en papel para las personas, sobre todo en los niños. “En un mundo que comienza a ser dominado por la lectura en redes sociales —Internet en general—, no debe perderse esta opción, dado que provee de otra experiencia al lector, es decir, un ritmo distinto para la comprensión de ideas, además de esa sensación de seguir una lectura en un formato específico, cercano, y que forma parte de otros rituales en soledad. Esa intimidad al leer un libro aún —creo—no es lograda por un monitor o celular. Desconozco la experiencia de seguir una lectura en tablet, aún no me da confianza en invertir en un aparato de este tipo”. Además dijo que la experiencia de una biblioteca debería ser más lúdica: “más allá de ir a consultar un libro, los lectores deberían tener más opciones en los sitios, que se vuelvan lugares integrales para comprender las lecturas. No el lugar silencioso al que se le ha asociado durante años. Debo aclarar que esta atmósfera debe continuar, pero quizás incorporar otras áreas que sirvan para tener acceso a todos aquellos productos culturales emanados de los libros”. También indicó que “si se leyera el Quijote y, además, hubiera acceso a un mapa digital de España con las teorías sobre el posible viaje en las regiones existentes, sería otra experiencia, quizás habría más compenetración. ¿Cómo era la Francia en la época que fue escrita “Rayuela” de Julio Cortázar? ¿Cómo el Londres de Charles Dickens? Si alguien leyera sobre dragones, tener acceso a grabados elaborados por artistas; fotografías del Jalisco que sirve de escenario para los cuentos de Juan Rulfo”.

Leslie Jaramillo Regino, estudiante del tercer año de preparatoria en el CBTIS 155 de Tijuana, Baja California, México. Foto: cortesía.
Leslie Jaramillo Regino, estudiante del tercer año de preparatoria en el CBTIS 155 de Tijuana, Baja California, México, opinó que las bibliotecas son muy importantes: “porque son unos de los pocos espacios de aprendizaje a los que los jóvenes pueden tener acceso y que sin duda deben preservarse, ya que uno no disfruta igual leer un buen libro en papel y leyendo en la comodidad de un ambiente silencioso, a descargarlo con un programa de computadora, no es para nada cercana la experiencia”. Agregó que le gustaría que existieran más bibliotecas en México y sean más accesibles en cuanto a locación: “para que todos podamos tener una biblioteca cerca cuando tenemos deseos de leer. Me agradaría mucho que dieran más énfasis a la buena literatura mexicana, porque tenemos un inmenso repertorio de escritores que son buenísimos”.
Retos de los medios de comunicación en la promoción de la cultura mexicana
El poeta y ensayista Gabriel Zaid, criticó el estado actual del periodismo cultural: “lo escandaloso no es que se escriban reportajes, comentarios, titulares o pies de fotos con tropezones parecidos, sino que lleguen hasta el público avalados por sus editores. O no ven la diferencia o no les importa. Así como los títulos profesionales avalan la supuesta educación de personas que ni siquiera saben que no saben (aunque ejercen y hasta dan clases), los editores avalan la incultura como si fuera cultura, y la difunden, multiplicando el daño. El daño empieza por la orientación del medio (qué cubre y qué no cubre, qué destaca, bajo qué ángulo) y continúa en el descuido de los textos, los errores, falsedades, erratas y faltas de ortografía”. Además indicó que nunca es tarde para volver a respetar a los lectores y subir el nivel de la vida pública, “por el simple recurso a la buena información, el buen juicio y el buen gusto. Habría que empezar por lo mínimo: un departamento de verificación de afirmaciones, para no publicar tantas cosas infundadas, vacuas o francamente cómicas. Parece insignificante, pero es algo cargado de significación. El mensaje implícito daría un giro de 180 grados: no publicamos basura”. [9]
Para Néstor García Canclini, es necesario involucrar a los medios de comunicación en el fomento de la lectura: “no sólo a las radios y televisoras culturales; también a la televisión comercial como parte de sus responsabilidades públicas en la convergencia digital, es una tarea indispensable para desarrollar la industria editorial y expandir la lectura. Todo esto queda por hacer si aspiramos hacia un país con lectores. Y como si fuera poco, hay que recordar lo que la sociología y la economía de la cultura han vuelto ya una obviedad: la mayoría de los planes de movilidad cultural se restringen a los públicos de siempre si no hay movilidad económica y calidad educativa”.
Reflexiones finales

Liliana Pedroza, académica y escritora. Comparte residencia entre México, España y Estados Unidos. Foto: Alicia Arvayo.
Liliana Pedroza, doctora en Literatura Hispanoamericana por la Universidad Complutense de Madrid, España, dijo que las bibliotecas públicas son importantes, porque resguardan el material que da testimonio de ese largo proceso de conocimiento de sociedades enteras a través del tiempo. “Es el lugar donde se propicia el diálogo con otras mentes y da cabida a un público plural”. Reflexionó sobre el proceso de investigación de su tesis doctoral en donde realizó un catálogo sobre cuentistas mexicanas que recorre todo el siglo XX hasta los últimos años. Tuvo que viajar por toda la República Mexicana, “ya que la Biblioteca Nacional de México no resguarda gran parte de lo que se publica en el país”. Según le explicó un trabajador de esta biblioteca: no hay recursos para adquirirlos, almacenarlos ni conservarlos. “A esta dificultad se añadió que no hay ninguna biblioteca estatal o universitaria preocupada por resguardar las publicaciones de su localidad. Tuve entonces que recurrir a bibliotecas extranjeras como la Biblioteca Nacional de España en Madrid de la que conocí su trabajo exhaustivo y sistemático por albergar todo lo que se edita en territorio español y a la Library of Congress en Washington su interés por la producción literaria en México aun cuando se tratara de una autora desconocida con una edición de escaso tiraje. Lamenté que no hubiera políticas parecidas en México”, concluyó la académica.
Referencias
[1]“Cinco mil años de palabras: comentarios sobre el origen, evolución, muerte y resurrección de algunas lenguas”, Carlos Prieto; pról. de Carlos Fuentes. 2ª. ed. Fondo de Cultura Económica, México, 2007, p. 89.
[2]“El español: una lengua viva. Informe 2012”. Centro Virtual Cervantes; Instituto Cervantes, España: http://cvc.cervantes.es/lengua/anuario/anuario_12/i_cervantes/p01.htm Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
[3] “Catálogo de las Lenguas Indígenas Nacionales”, hecho por el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI), México, 2005: http://www.inali.gob.mx/pdf/CLIN_completo.pdf Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
[4] The Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido: https://mexicanculturalcentre.com/ Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
[5] Centro de Enseñanza para Extranjeros (CEPE), UNAM, México: http://www.cepe.unam.mx/sedes.php Fecha de consulta: 8 de octubre de 2015.
[6]“Leer ya no es lo que era”, Ernesto García Canclini. “Encuesta Nacional de Lectura. Informes y evaluaciones”, Daniel Goldin (editor), UNAM-Conaculta, México, 2006, pp 27-37.
[7] Boletín de prensa Núm. 148/15, INEGI, Aguascalientes, Ags. México, 22 de abril de 2015.
[8] Biblioteca José Vasconcelos, México: http://www.bibliotecavasconcelos.gob.mx/ Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
[9]“Periodismo cultural”, Gabriel Zaid, Letras Libres, España, edición marzo 2006, pp 30-32. Versión digital: http://www.letraslibres.com/revista/convivio/periodismo-cultural-0 Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
The Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido, y su aportación para la difusión de la diversidad cultural
Eduardo Estala Rojas
Fundado en la ciudad británica de Nottingham, el 16 de septiembre de 2013, el Mexican Cultural Centre (MCC), es el primer centro virtual sin fines de lucro, registrado en el Reino Unido, que promueve y difunde la cultura mexicana. En colaboración internacional con proyectos académicos, culturales y artísticos.

La Jornada por el “Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo”, organizado por el Museo Regional de Guanajuato Alhóndiga de Granaditas, México, el 21 de mayo de 2015. Foto: Doris Zendejas / Museo Regional de Guanajuato Alhóndiga de Granaditas, México.
Contamos con un equipo de profesionales mexicanos como Adriana E. Vera Pérez, Ana L. Pazos González, Bertha A. Denton Casillas, José L. Santos López, Paniel Reyes Cárdenas y Rafael Gutiérrez Mercadillo. Nuestro equipo es interdisciplinario desde estudiantes hasta investigadores. Trabajamos en colaboración con la revista cultural mexicana Bicaalú, la Sociedad Mexicana de Metafísica y Filosofía de la Ciencia, México-Reino Unido, Colectivo Escénico: Dragones en el Horizonte, Tijuana, Baja California, México, The Onion Films, Guanajuato, México, programa de radio “Hecho en México”, Londres, Reino Unido.
La filosofía y visión del MCC
La promoción del legado y la diversidad cultural de México en el mundo. La divulgación de los valores universales, la meritocracia, la cultura del esfuerzo y honor. De esta manera, contamos en el MCC con personas capacitadas, éticas, cívicas, responsables, honestas, integras y seleccionadas por sus méritos personales. En nuestra página electrónica publicamos artículos, reportajes, poesías, cuentos, ensayos, traducciones y libros. Organizamos simposios, presentaciones editoriales, proyecciones cinematográficas en universidades, museos, ferias de libro y centros culturales. Somos divulgadores de la ciencia, tecnología y cultura. Todas nuestras actividades y contenidos editoriales tienen estándares de calidad. Por nuestro trabajo, José Antonio Meade Kuribreña, secretario de Relaciones Exteriores de México, nos envió una carta diplomática el 30 de enero de 2014, a Nottingham, Reino Unido, con el propósito de darnos: “Un reconocimiento por lograr conjuntar una pluralidad de expertos colaboradores, cuya participación deriva en la excelencia de los trabajos editados por ese centro bajo su digno cargo”.
Aportación de mexicanos al mundo

Luanda Smith, coordinadora de la Red U40, México; Gabriela Sánchez Villegas, Directora del Museo Regional de Guanajuato Alhóndiga de Granaditas, México; Eduardo Estala Rojas, Director General del Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido; Sergio Ramón Tovar Alvarado, Delegado del Centro INAH Guanajuato, México. Foto: Doris Zendejas / Museo Regional de Guanajuato Alhóndiga de Granaditas, México.
Al crear el Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido, generamos una solución a México a nivel internacional desde la visión diplomática y práctica: un proyecto digital innovador, presencial y único. Desde nuestra fundación estamos conscientes del potencial de nuestro país a nivel internacional y de las oportunidades que existen en el siglo veintiuno en la era digital para promover la cultura mexicana en todo el mundo. Sólo en una década se triplicó el uso de Internet en México: “Estima la Asociación Mexicana de Internet (Amipci) en más de 53 millones la cifra de cibernautas nacionales (2015)”. De 2013 al 2015 nuestro portal electrónico ha sido visitado por 90 países; cuenta actualmente con 173 contenidos con estándares de calidad; traducciones en 6 idiomas; 110 colaboradores de más de 30 áreas profesionales; 3 libros electrónicos publicados; 100 notas de prensa sobre la labor que realizamos; 23 eventos organizados en museos, universidades, centros culturales y festivales; 24 cursos, talleres y conferencias académicas de capacitación para el MCC; 15 reconocimientos internacionales por nuestro trabajo.
¿Por qué es importante crear más centros mexicanos en el extranjero?
Según el Instituto Cervantes de España: “México es el país con el mayor número de hispanohablantes en el mundo 112.336.538”. “El español: una lengua viva. Informe 2012”. México cuenta con 11 familias lingüísticas dispersas en todo el territorio, de estas se desprenden 68 lenguas y 364 dialectos, de acuerdo con el “Catálogo de las Lenguas Indígenas Nacionales”, hecho por el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI). La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), tiene actualmente 6 centros de estudios mexicanos, ubicados en Francia, España, China, Canadá, Estados Unidos y Reino Unido. Para el British Council: “El español es la lengua extranjera más importante en el Reino Unido”.“Languages for the future. Which languages the UK needs most and why”. Informe 2013”. La Alianza Francesa cuenta con 1.040 centros en 136 países de todo el mundo; existen 38 centros en México. El British Council tiene más de 109 centros a nivel internacional; existe 1 centro en México. El Instituto Cervantes de España está presente en 90 ciudades de 43 países en los cinco continentes.
¿Qué opinan los expertos sobre el MCC?
“El Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido, tiene que ver con la creación de un espacio comunitario entre la cultura mexicana e hispanoamericana y la cultura escrita en inglés en los Estados Unidos y en Gran Bretaña. No sólo viene a llenar un vacío sino que también ennoblece la presencia de la cultura hispánica en las redes sociales y permite un mejor conocimiento entre las culturas de origen hispánico y de otras lenguas”, señala Adolfo Castañón, miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua.
Para Salvador Venegas-Andraca, doctor en Física y Ciencias de la Computación por la Universidad de Oxford, Reino Unido: “México es un productor nato de conocimiento científico y artístico. Desafortunadamente, la imagen que México tiene en el extranjero no hace justicia a nuestra capacidad creadora”. Sobre el trabajo del Mexican Cultural Centre (MCC), expresa: “En este contexto el trabajo del MCC se justifica. La muy alta calidad de los contenidos y la pertinente promoción de los mismos empleando herramientas modernas de comunicación como Facebook y correo electrónico, por ejemplo, han logrado que el MCC sea ya un referente en México y Europa”.
Sofía Alejandra González De Aguinaga, licenciada en Mercadotecnia y maestra en “Tourism, Environment and Development”, por el King’s College London, Reino Unido, como becaria CONACyT, declara al respecto: “El Mexican Cultural Centre ha realizado un excelente trabajo de promoción cultural de México y de reconocimiento al talento mexicano. Éste es un portal único que ha sabido sumar esfuerzos para comunicar con gran calidad, tanto de forma como de fondo, artículos escritos por profesionales no sólo mexicanos sino también internacionales. El hecho de que los contenidos del portal abarquen diversos temas dentro del contexto cultural mexicano, y sean escritos desde diferentes puntos de vista, hace mucho más interesante su lectura y por lo tanto más accesible. Asimismo, el MCC ha sabido conjugar las experiencias de los mexicanos en el Reino Unido y difundir diversas convocatorias, eventos y conferencias para mexicanos en dicho país, sirviendo como enlace cultural. Finalmente, la asociación del MCC con otras publicaciones y organizaciones le ha dado más empuje tanto al portal como a sus contenidos permitiéndoles mayor difusión. Además, poco a poco la comunicación del portal del MCC ha ido consolidándose cada vez más a través de las redes sociales, como Facebook, y de los boletines semanales. Por todo esto, estoy segura de que el MCC seguirá creciendo y deleitándonos con sus contenidos”.
Ana Laura Pazos González, comunicadora y maestra en Humanidades por la Universidad Anáhuac de México, comenta: “En últimos tiempos, la capital del Reino Unido —donde se escuchan infinidad de acentos e idiomas— nos hace pensar en una moderna Torre de Babel. La voz de México se lee fuerte y clara en el portal y las redes sociales del MCC, la cual resuena no sólo en las islas británicas, sino en diferentes países donde se entiende el español. A través de los artículos, poesías, ensayos y cuentos publicados por el Mexican Cultural Centre, los mexicanos que están lejos pueden sentirse cerca de casa, y los extranjeros tienen la oportunidad de acercarse al mundo cultural mexicano”.
Adriana Elizabeth Vera Pérez, quien trabaja en el Programa de Historia Latinoamericana, Universidad de Chicago, Estados Unidos, señala: “El MCC ha cumplido su objetivo, que es el de dar a conocer, promover y difundir las diversas actividades relacionadas con el arte y la cultura en sus diversas manifestaciones dentro de nuestro propio país, México, y aún más allá de sus fronteras, en diferentes ciudades de otros países, de una manera accesible y clara. Se da a conocer, se recibe información de diversos eventos, en diferentes localidades, y de una amplia variedad de tópicos. Otra cosa importantísima es que también ha dado a conocer a México y su cultura en Inglaterra y otros países de Europa, tanto directamente como indirectamente al alcanzar diversas universidades y organizaciones culturales, artísticas, sociales y gubernamentales”.
Retos del Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido
Nuestro mayor reto como organización internacional es tener más recursos económicos para cubrir los gastos que realizamos día a día en el MCC. Actualmente, estamos solicitando donativos económicos al MCC, para mantener las operaciones y pagar anualmente los gastos de hosting, edición web, honorarios del editor y colaboradores principales. Nuestra organización no recibe fondos o ayudas de ninguna entidad.
Referencias
“Mexican Cultural Centre: Creación y diálogo internacional”, Eduardo Estala Rojas. The Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido: https://mexicanculturalcentre.com/2014/08/31/mexican-cultural-centre-creacion-y-dialogo-internacional/ Fecha de consulta: 1 de mayo de 2015.
“El español: una lengua viva. Informe 2012”. Centro Virtual Cervantes; Instituto Cervantes de España: http://cvc.cervantes.es/lengua/anuario/anuario_12/i_cervantes/p01.htm Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
“Catálogo de las Lenguas Indígenas Nacionales”, hecho por el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI), México, 2005: http://www.inali.gob.mx/pdf/CLIN_completo.pdf Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
“Languages for the future. Which languages the UK needs most and why.” British Council: Informe 2013, Reino Unido: http://www.britishcouncil.org/organisation/publications/languages-future Fecha de consulta: 15 de abril de 2015.
Alianza Francesa: http://www.alianzafrancesa.org.mx/ Fecha de consulta: 1 de mayo de 2015.
Instituto Cervantes: http://www.cervantes.es/default.htm Fecha de consulta: 1 de mayo de 2015.
British Council (México): http://www.britishcouncil.org.mx/ Fecha de consulta: 1 de mayo de 2015.
“Estudio sobre los hábitos de los usuarios de internet en México, 2014”. Asociación Mexicana de Internet (Amipci): https://www.amipci.org.mx/estudios/habitos_de_internet/Estudio_Habitos_del_Internauta_Mexicano_2014_V_MD.pdf Fecha de consulta 18 de mayo de 2015.
“Se triplicó en 10 años el número de usuarios”, César Arellano. Periódico “La Jornada”.
Lunes 18 de mayo de 2015, México, p. 36. Versión digital: http://www.jornada.unam.mx/2015/05/18/sociedad/036n2soc Fecha de consulta: 18 de mayo de 2015.
Nota del editor: Conferencia inaugural en la Jornada por el “Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo”, celebrado el 21 de mayo de acuerdo a la Asamblea General de la UNESCO. Evento organizado por el Museo Regional de Guanajuato Alhóndiga de Granaditas, México [21 de mayo de 2015]. Participaron Red U40, México, The Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido, Secretaria de Educación de Guanajuato (SEG), y la comunidad Otomí del Estado de Guanajuato.
Eduardo Estala Rojas, mexicano, es fundador y director general de The Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido. Poeta, editor, narrador, periodista, dramaturgo y asesor cultural. Estudió Lengua Inglesa, Literatura y Cultura en The City and Guilds of London Institute, New College Nottingham y Nottingham Trent University, Reino Unido. Autor de los libros “Blanco Oro Negro” (Reino Unido, 2012) y “La llave de los elementos” (Reino Unido, 2013). Publicó la obra de teatro “El bosque y la magia de Sofía” (Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido, 2014), en coautoría con Bertha Alicia Denton Casillas. Realizó la compilación “The Mexican Cultural Centre: 15 voces de la cultura mexicana, México-Estados Unidos-Reino Unido” (Mexican Cultural Centre (MCC), Reino Unido, 2014). Ha organizado a nivel internacional ferias de libro, simposios, festivales, coloquios, conferencias. Además ha trabajado como periodista, editor y jefe de redacción en diversos medios de prensa en los Estados Unidos, México, Reino Unido. Su trabajo literario y periodístico ha sido traducido al inglés, francés, portugués y árabe. Por su labor cultural y artística ha obtenido premios y reconocimientos internacionales. Correo electrónico: mexicanculturalcentre@gmail.com
«Voyage a la constellation du centaure»: entretien de Don Adolfo Castañón, membre numéraire de l’Académie Mexicaine de la Langue
Eduardo Estala Rojas
Le 8 août prochain, Adolfo Castañón fêtera ses soixante ans. Au cours des années, il crée une œuvre prolifique tant de poète et de conteur que d’essayiste, d’éditeur et de critique littéraire. Parmi ses travaux, on remarque ses études sur Montaigne, Alfonso Reyes, Juan José Arreola et Octavio Paz.
Il est membre de l’Académie Mexicaine de la Langue depuis le 10 mars 2005 et a reçu le prix Diana Moreno Toscano (1976), le premier prix national de littérature Mazatlán (1995), le prix Xavier Villaurrutia (2008), le prix national de journalisme José Pagés Llergo (2010) dans la catégorie des programmes culturels de la télévision pour l’émission «Les maîtres derrière les idées» diffusée sur TV UNAM. Il a aussi été promu Officier des Arts et Lettres par le gouvernement français en 2004. Aujourd’hui, il occupe le poste de bibliothécaire archiviste de l’Académie Mexicaine de la Langue et est secrétaire de la Commission de Consultations Linguistiques depuis 2005 et président de la Commission de Communication et d’Informatique depuis 2009. Enfin, Adolfo Castañón est membre du Programme de chercheurs associés du Collège du Mexique pour lequel il prépare l’édition de la seconde partie de la correspondance entre Alfonso Reyes et Pedro Henríquez Ureña (1914-1916), en collaboration avec Isaura Contreras et Alma Delia Hernández.
—En 1973, vous publiez une biographie d’Alphonse Gabriel Capone dit Al Capone, votre premier livre que vous signez d’un pseudonyme et, grâce aux droits d’auteur, vous voyagez en Europe pendant quatorze mois. Vous vivez en Israël, dans un kibboutz, et en France où se conforte votre vocation. En quoi ce voyage a-t-il été déterminant pour votre esprit encyclopédique?
—En réalité, la biographie d’Al Capone n’a pas été mon premier livre, avant il y avait eu Autobiographie précoce, une commande d’Huberto Batis, et un certain nombre de poèmes, de contes et d’essais. Le voyage a été une expérience initiatique. En plus d’Israël qui se trouvait en pleine Guerre du Kippour, je suis allé en Grèce, en Turquie, en Italie, en Espagne et en France. J’ai connu la rue où j’ai appris à dormir, j’ai vécu des aventures, la pauvreté, les intempéries, l’amitié, l’art de survivre physiquement et mentalement. Ce voyage était motivé par l’envie de savoir si la civilisation avait réellement existé. Par exemple, j’ai rejoint à pied le port grec de Patras à la ville d’Olympie distante de 175 km. Ce fut un grand tour dans l’esprit de ceux que faisaient les jeunes Anglais du XIXe siècle. Le Castañón qui a quitté le Mexique en 1973 était une personne très différente de celui qui est revenu au milieu de 1974. Le fil conducteur dans le labyrinthe du voyage a été la culture grecque et latine. Je transportais deux livres: Le cicérone de Jakob Burckhardt et l’édition française du Bain de Diane de Pierre Klossowski.
—Vous dites dans un entretien à Radio France International: «Mon premier jeu a été une fenêtre à travers laquelle je regardais passer les gens et les voitures. Les noms de ces voitures m’impressionnaient. Et j’aimais inventer des mots». Quelle est votre fenêtre aujourd’hui? Quels mots aimeriez-vous inventer au XXIe siècle?
—Mes fenêtres actuelles sont celles de l’Académie de la Langue et du Collège du Mexique, des institutions où je travaille et auxquelles j’essaye de dédier tous mes efforts. Je ne sais pas si mon truc aujourd’hui est d’«inventer de nouveaux mots», bien que je vienne de mettre au point le livre des jitanjáforas* d’Alfonso Reyes, mais j’ai toujours été attiré par le secret métier de ceux qui baptisent les nouveaux produits pharmaceutiques de noms qui, j’en suis sûr, obéissent à des règles et des codes. Je n’aimerais pas tant inventer de nouveaux mots —qui s’apparentent parfois à des étiquettes mensongères ou même mercantiles— que de donner un sens plus intense, puissant et pur à des mots comme «silence», «eau», «amitié», «roche».
—Vous êtes l’un des critiques littéraires de tradition et d’autorité pour la langue espagnole, vos livres rendent compte de cela, par exemple: Anthologie de la littérature mexicaine, América syntaxis, Voyage au Mexique. Où placez-vous la critique littéraire au Mexique, en Amérique Latine et dans les Caraïbes en cette première décennie du XXIe siècle?
—Je crois que la critique littéraire dans notre monde hispanique, américain et latin, a une fonction spéciale: celle d’aider à construire et à restaurer le sens communautaire et réanimer les traditions enfouies, expatriées ou enterrées par la destruction pratiquée par ce qu’on appelle le «progrès». Ce n’est ni le travail du lecteur critique, ni celui d’un disc-jockey —pour le dire en français— qui passe de la musique pour accompagner la dernière fête ou celui d’un camelot vantant au supermarché les nouvelles promotions déjà périmées, mais peut-être celui d’un archéologue qui va identifier dans une lande les gisements archéologiques que le sous-sol garde jalousement, les ressources grâce auxquelles le voyageur peut survivre à la longue par lui-même et vaincre les effets de la pauvreté spirituelle. Ces gisements peuvent être certainement des sources qu’il est important de conserver et de réévaluer. La mission est celle, modeste, de sauver la musique cachée du monde dans les travaux des auteurs et artistes contemporains.
—Cela entre dans la tradition mexicaine depuis Alfonso Reyes, Octavio Paz, Juan José Arreola et José de la Colina. Où vous situez-vous dans la tradition littéraire au Mexique?
—Une tradition, c’est un peu plus qu’une donnée nationale. J’aimerais m’inscrire dans l’orbite d’Alfonso Reyes, de Pedro Henríquez Ureña, d’Octavio Paz et de leurs amis des revues Plural et Vuelta, de José Lezama Lima, Eliseo Diego, Fina García Marruz —que j’ai préfacés et intégrés dans mon anthologie—, de José Bergamín, de León Felipe, de Cyril Connolly, d’Evelyn Waugh, de George Steiner et de l’historien Harold Acton. Une tradition de style austère, presque apollinien… quoique les voix de la culture populaire telles qu’elles s’expriment à travers Carlos Monsiváis ne cessent de m’accompagner.
—En octobre 2000 et en janvier 2001 la NRF, célèbre revue française, vous a invité comme éditeur à préparer deux numéros sur la littérature mexicaine contemporaine. Quels auteurs sélectionneriez-vous pour un nouveau dossier en 2012 ? Et pourquoi?
—Je ne sais pas si je serais intéressé à refaire un dossier comme ceux-là, —strictement mexicains— qui incluaient Octavio Paz, Juan José Arreola, Salvador Elizondo, Alejandro Rossi, José de la Colina, Eduardo Lizalde et Carlos Fuentes. Si je devais refaire une anthologie de cette espèce, une gageure serait peut-être d’inclure les mêmes auteurs avec d’autres textes, mais en essayant de les mettre en correspondance avec des auteurs hispano-américains vivants ou morts comme Blanca Varela, Ramón Xirau, Eugenio Montejo, Rafael Cadenas, José Balza, José Kozer. C’est que j’éprouve la nécessité chaque fois plus pressante de nous réunir autour du foyer de la culture communautaire. J’intégrerais aussi des auteurs comme le poète Francisco Cervantes, l’historien Luis González y González, parmi ceux de ma génération les Mexicains José Luis Rivas, Francisco Hinojosa, Francisco Segovia ou encore le critique Christopher Domínguez et des plus jeunes, des auteurs comme la Mexicaine Malva Flores et la Colombienne Gloria Posada. Mais, dans la mesure où ce qui m’intéresse maintenant, c’est chercher la manière de sauver, de réunir et d’harmoniser nos lettres, je n’ai plus pour le moment le désir d’affirmer notre littérature hors de nos régions, mais celui de lui donner une signification durable à l’intérieur de notre propre espace culturel.
—Il faut reconnaître que le monde de l’édition au Mexique manque de professionnalisation. Qu’en pensez-vous?
—Le manque de professionnalisation dans le monde de l’édition vient du fait qu’on valorise et reconnaît peu à l’université le travail éditorial en général ou dans ses différentes étapes. Ni la traduction, ni le commentaire de livres, ni la révision, et encore moins la vente ou la diffusion sont des disciplines reconnues académiquement ou appréciées d’un point de vue scientifique ou technique. Le marché de l’édition et au-delà celui de la gestion culturelle sont dans leur ensemble dominés par l’improvisation et la contingence, le népotisme et par d’autres mots en «ismes» infâmes comme celui attribué à la triste mère Malinche qui s’agenouille devant tout ce qui vient de l’étranger. Un éditeur qui se respecte doit savoir lire et écrire, relire et récrire au moins dans trois langues, sans parler de la maîtrise des terribles minuties de nature typographique.
—Comment développer la professionnalisation de l’éditeur?
—Le problème de la professionnalisation des éditeurs est un thème qui pourrait faire partie d’une réforme universitaire générale. Je n’irai pas si loin. Je me contenterais du fait que les gens sachent lire et relire, écrire et récrire dans leur propre langue et dans d’autres, et, en plus, qu’ils possèdent plusieurs dictionnaires, mais tout dépend du type d’éditeur. Il existe beaucoup de titres et de manuels ad hoc. Voir: Martínez de Souza. A consulter aussi: Les mythes de l’éditeur de votre conseiller en lecture: Adolfo Castañón (Lectorum, 2005).
—A quels défis est confrontée l’édition de livres face aux différentes formes de publications numériques?
—La compétition entre le numérique et le non numérique est un leurre. Il est évident qu’un bon éditeur le reste dans un espace ou dans l’autre.
—Quelle est la principale thématique de La troisième moitié du cœur, votre recueil de poèmes à paraître?
—Dans La troisième moitié du cœur, il y a bien sûr des déclarations d’amour et des déclarations de guerre. C’est un livre insondable pour moi-même, mais je crois que le lecteur pourra y trouver une carte du labyrinthe et une boussole pour en sortir.
*Type de poème bruitiste.
En espagnol:
http://www.siempre.com.mx/2012/01/viaje-a-la-constelacion-del-centauro/
Eduardo Estala Rojas est directeur et fondateur du Mexican Cultural Centre, Royaume-Uni.
Entrevista con Elena Garro: “Estoy absolutamente sola, ya no tengo amigos”
Miguel Ángel Muñoz
Exiliada en Cuernavaca desde hace casi cinco años, Elena Garro (Puebla, 1920-Cuernavaca 1998) frágil, triste, desgarrada en todos los sentidos, refleja una soledad inmensa, además de estar delgadísima por no comer según palabras de su hija Helena Paz. Pero la Garro la contradice: “Sí como, pero Helena que es necia quiere que coma como pelón de hospicio y no puedo, no me da hambre”.
En su novela Inés (Editorial Grijalbo, 1995), Elena Garro nos presenta la vida de una muchacha que sale del convento para trabajar como sirvienta en una casa de París. Ahí ocurren sucesos inauditos; tal vez el más extraño: la visita de una mujer que se hace llamar María Sabina. Autora de libros claves en la literatura mexicana, como sus novelas: Los recuerdos del porvenir, (1963), Testimonios sobre Mariana, (1981), Y matarazo no llamó… (1991); sus obras de teatro: Felipe Ángeles (1979), Un hogar sólido (1958), Sócrates y los gatos (2003); sus cuentos memorables: Andamos huyendo Lola (1980), La culpa es de los tlaxcaltecas (1987) y El accidente y otros cuentos inéditos (1997) y su inolvidable testimonio: Memorias de España 1937 (1982). En entrevista, la Garro habla de Inés de sus fantasmas y demonios, del insólito ritual que se desarrolla a través de las páginas de su más reciente novela.
¿Cómo se siente Elena Garro viviendo en Cuernavaca y con la aparición de su novela Inés?
Feliz con el libro, pero también muy triste y sola. Ahora es todo tan feo, hay que salir a la calle con una máscara anti-gas, todo está horrible, antes se podía ver el cielo libremente, era un país bonito, pero ahora, ¿qué le han hecho? Hoy es otro país, Cuernavaca es otra ciudad que yo no conozco, toda harapienta y mugrosa, con todas sus calles pintadas y descarapeladas, ese toque poético se perdió. Será que entré en una dimensión desconocida. A la gente que observo triste, destrozada y apachurrada, nadie es feliz en medio del desastre en que vivimos.
¿Por qué Inés se mantuvo inédita tantos años?
No tenía ganas de publicarla. Además no me acordaba que la novela estaba en manos de la Editorial Grijalbo y que se encontraba desde hace años ahí. Entonces, hablé con el editor y le di permiso de publicarla. Por otro lado, no tengo dinero y de lo único que vivo es de mis libros, así que tuve que publicar. Inés la escribí allá por los años setenta, pero se presentaron algunos viajes y es ahí donde conozco a diversos personajes entre ellos a la protagonista: una monja buena, que se enfrenta al ateísmo y la crueldad de los seres humanos.
La novela refleja en momentos un fuerte fervor religioso al presentar al personaje de Inés como una monja inocente ante el mundo, ¿cree que sea igual al fervor religioso de usted?
La idea de Inés es la de una chica inocente, pura, que viene de un convento y acaba en manos de un grupo de degenerados y verdugos humanos. Pierde su fervor cuando le pasan esas cosas horribles, además nadie le ayuda, ni Dios y mucho menos sus amigos, algo muy parecido me pasa hoy día. La gente es mala. Recuerdo cuando alojaba a líderes campesinos en casa de Octavio Paz, allá por los años setenta. Siempre ayudé en lo que pude; en momentos alojé hasta cien personas en la casa, dormían en el salón o en la biblioteca y comíamos juntos. Hacían cosas horribles con los campesinos y lo siguen haciendo. Ahora lo veo aquí cerca en Ahuatepec y los siento igual de dolidos, es por eso que Inés tiene miedo del mundo y de los seres que están en la novela por malos.
¿Cree que el fervor religioso de Inés en nuestra sociedad actual se pierde totalmente por la maldad del mundo?
Ahora el amor es tecnológico, por ejemplo, el erotismo es la técnica del amor. También hay un grupo de hombres progresistas y yo los odio; esos seres que se empeñan en destrozar al planeta para darnos un mundo horribles sin amor, caridad, pasión, hasta sin Dios, lo cual es cosa de ellos, que han terminado con ese mundo poético y bello que algún día conocí.
¿Quiénes son esos hombres?
No quiero hablar de eso, están ahí nada más y hay que tener mucho cuidado con ellos.
¿Cómo era ese mundo de aquellos años y que no presenta en Inés?
Lleno de amor, bondad, pasión por el amor; además, había un respeto por la iglesia y no teníamos tantos curalocos o psiquiatras como hoy día. Es por eso que Inés pierde ese amor por Dios, por la vida misma, pues descubre que vive en un mundo de terror, lleno de odio, descompuesto por todos lados. Ahora me pongo muy triste pensando en esas cosas, pero quién es el culpable de todo esto Dios de los Cielos, para colgarlo o fusilarlo por lo menos ¿no?…
¿Con la publicación de Inés sigue siendo su novela preferida Y matarazo no llamó… o ya cambió de opinión?
No, la única que me gusta es Y matarazo no llamó… ¿no te parece? Es una novela diferente. Inés la publiqué por dinero, porque no tengo casi ni muebles, no hay sillas, tampoco tengo una cama y mucho menos una mesa donde escribir. Antes escribía en el suelo, pero ahora me dan asco las cucarachas y todos los demás animales que rondan la casa.
¿Cree que Inés es parte del realismo mágico o de esa literatura fantástica de sus novelas anteriores como Los recuerdos del porvenir?
No me gustan los inventos literarios. Alejo Carpentier definió de maravilloso el realismo mágico de algunos de mis cuentos, pero él no me gusta, no sabía escribir en español, sabía escribir en francés. Y bien, él y yo nos conocimos en España en 1937 y se portó atento sólo que como escritor no me interesa.
¿Quiénes son sus escritores preferidos?
Me gusta Martín Luis Guzmán por su español perfecto, al igual que Vasconcelos y Rulfo. Pero todos ellos ya están muertos. Ahora queda simplemente el recuerdo de esa gran literatura.
Y de los nuevos escritores, ¿qué piensa, los lee?
No conozco nada, no me dan ganas de leerlos. Sólo me he dado cuenta de que a los jóvenes ya no les interesa leer a los clásicos españoles. Recuerdo que en la universidad leíamos a los ingleses en inglés, a los latinos en latín, pero era otra época, otros tiempos, ahora con esos seres malvados que quieren acabar con toda la literatura hermosa. Hoy estoy absolutamente sola, no tengo amigos y nadie me visita.
Pero usted tiene muchos amigos, gente que la quiere y algunos de ellos la han ayudado desde su regreso de París. ¿Por qué se siente sola, es la misma soledad de Inés?
No tengo amigos, cuáles amigos. Además, me están jodiendo esas personas que escriben que Elena Garro es la maestra, la genio, la mejor escritora de nuestro país y de América Latina. Por eso nos tienen muertas de hambre. Todo eso lo utilizan para hacerse de puestos en el gobierno y sacarle dinero. Dicen que Elena Garro tiene muchos amigos, y que se le da apoyo, que pronto nos darán una casa, un trabajo magnífico a la hija, todo lo que quiera… ahora tengo que escribir libros para no morirme de hambre. Emilio Carballido habló para traerme y para qué, para morirme de hambre solamente. En París, éramos de la clase media francesa, aquí no somos nada.
¿Qué hay de sus textos inéditos, qué espera de Elena Garro para los años que le faltan por vivir?
Estoy por sacar Un corazón en un bote de basura. Se editará en Grijalbo pues necesito dinero, y de lo único que vivo es de ellos. Tengo que escribir, aunque en las noches me entra una depresión horrible y no puedo hacerlo; pienso en historias y no duermo, pero luego aunque no quiera me duermo.
¿Cuáles son las preocupaciones hoy día de Elena Garro?
Mis gatos, que no me gusta dejarlos con nadie porque no los tratan bien. En México, les ha pasado desgracia tras desgracia; además, en nuestro país la gente no tiene ningún respeto por los animales, dicen que no tienen alma, que no sufren. No me gustan los toros y tampoco los rastros, es mejor ser vegetariano, ¿no?…
Nota del editor: Esta entrevista pertenece al libro Cronicas de la memoria, de Miguel Ángel Muñoz, de próxima aparición.
Miguel Ángel Muñoz, mexicano, es poeta, historiador y crítico de arte. Su dedicación a la creación artística actual es absoluta; compagina su labor en El Financiero, La Jornada Semanal y en la revista Casa del Tiempo, con la de comisario de exposiciones. Ha trabajado personalmente con muchos artistas; entre ellos, Eduardo Chillida, Rafael Canogar, José Luis Cuevas, Josep Guinovart, Roberto Matta, Antoni Tàpies, Richard Serra, María Girona, Vicente Gandía, Ricardo Martínez, Chema Madoz, Luis Feito, Xavier Grau, Charo Pradas, Ignacio Iturria, Albert Ràfols-Casamada, Robert Rauschenberg y Luoise Bourgeois. Es autor de los libros de ensayo: Yunque de sueños. Doce artistas contemporáneos (Editorial Praxis, 1999), Ricardo Martínez: una poética de la figura (CONACULTA, 2001), La imaginación del instante: signos de José Luis Cuevas (Editorial Praxis, 2001), El espacio invisible. Una vuelta al arte contemporáneo (Ediciones Batarro, Málaga, España, 2004), Convergencia y contratiempo (Plan C Editores- CONACULTA, 2008), Espacio, superficie y sustancia. La obra de Ricardo Martínez (Siglo XXI Editores, 2009) El espacio vacío, (CONACULTA, 2009), Gutiierre Tibón. Lo extraño y lo maravilloso (CONACULTA, 2009). Asimismo ha editado y comentado los libros El asombro de la mirada. Convergencia de textos. (Editorial Síntesis, Madrid, España, 2010) Espejismo y realidad. Divergencias estéticas de Rafael Canogar (Editorial Síntesis, Madrid, España, 2011) y Elogio del espacio. Apreciaciones sobre arte de Rubén Bonifaz Nuño (UNAM, El Colegio Nacional y UAM, México 2012). Además, es autor de los libros de poesía El origen de la niebla (CONACULTA, 2005), Espacio y luz (Centro de Producción Gráfica, México, 2003) con serigrafías originales de Albert Ràfols-Casamada, Convergencia (Centro de Producción Gráfica, México, 2003) y Travesías (Centro de Producción Gráfica, México,2004) con serigrafías originales de José Luis Cuevas, Cinco espacios para Rafael Canogar (Ediciones El Taller, Madrid, España, 2004), con grabados originales de Rafael Canogar y Fuego de círculos (Editorial Praxis, México 2012). Sus textos se publican en diversas publicaciones de México, España y América Latina. Es director de la revista literaria Tinta Seca. Es colaborador, asimismo, de las revistas Metérika (Costa Rica), Banda Hispánica y Agulha (Brasil). Actualmente se está capacitando como doctor en Historia del Arte por la Universidad Nacional Autónoma de México. Es Miembro Asociado del Seminario de Cultura Mexicana. En 2009, fue reconocido por la Universidad Autónoma de Santo Domingo, República Dominicana y la Facultad de Artes por su “contribución al estudio del Arte Contemporáneo”.
Entrevista con Fernando del Paso: “Contra el prejuicio a la novela policial mexicana”
Miguel Ángel Muñoz
Bajo el sello de Plaza y Janés, apareció Linda 67, historia de un crimen (1995), que es la novela policial que Fernando del Paso decidió escribir allá por 1965. Del Paso empezó publicando José Trigo (1966), historia sobre un ferrocarrilero de Nonoalco- Tlatelolco; en 1976, publicó Palinuro de México y en 1987, Noticias del imperio, historia magistral sobre Maximiliano, Carlota y Juárez. Estos tres libros lo establecen, sin duda, como uno de los mejores narradores de nuestro país.
Linda 67, es la historia de David Srorense, un mexicano cosmopolita que asesina a su esposa gringa, Linda Laggrange –nacida en 1967– para poder cobrar un rescate de 15 millones de dólares y desaparecer con su amante Olivia. Del Paso plática cómo acabó con el prejuicio contra la novela policial mexicana y cómo se desarrollan sus personajes.
Usted tuvo la inquietud de escribir una novela policial allá por 1965, y la publica apenas a fines de 1995, ¿cree que se haya demorado un poco en participar en el género criminal de la literatura?
Mi inquietud por escribir una novela policial nació hace más de 30 años, antes de que me fuera a Inglaterra, porque era un buen lector de la colección El séptimo círculo y de otras novelitas que no figuraban en esa serie. Seguí el consejo de llevarme de vacaciones novelas del género porque me transformaban en un lector inocente. Ya tenía la deformación profesional de novelista, que le impide a uno disfrutar de una novela como un lector común y corriente. La novela policiaca si me daba esa posibilidad. Y siempre pensé que sería un reto interesante para un novelista de los que se llaman serios, o para un novelista como todos, o para uno tan común y no tan corriente, el hacer una novela policial. En Londres seguí leyendo libros con este tema de vez en cuando. No soy del todo un lector contante del género, es algo que me atrae por temporadas.
El ambiente de Londres e Inglaterra es el que ha prevalecido en las novelas de este tipo. La mayor parte de los grandes autores de la novela política son ingleses o norteamericanos. Casi todos pertenecen a las letras anglosajonas con excepciones que ponen a prueba la regla como Simenon, o Eco con su maravillosa policial que es El nombre de la rosa. Creo que mi estancia en Londres influyó para que situara la novela en un ambiente anglosajón. Pero no pude escapar a la casi necesidad de que el protagonista de la novela, David Sorense, fuera mexicano y cosmopolita.
Antes de concluir el texto original, ¿cuántos cambios de historia y estructura tuvo la novela?
En realidad hace sólo diez años me llegó, como caída del cielo, la idea de la trama, la esencia de ésta. Pero necesitaba mucho desarrollo, y entretenido como estaba con Noticias del imperio, tuve que suspender el proyecto de la novela en forma definitiva. De hecho después de Noticias del imperio, pasó por un largo periodo de silencio hasta que volvió esa inquietud y me dije: “Bueno, ¿Soy capaz o no lo soy? Lo intento y no”. Si mi respuesta era afirmativa había que hacerlo ya de una vez y no posponerlo más. Entonces, empecé a desarrollar la trama pero básicamente en la cabeza. Hasta hace un año que me senté a escribirla y me enfrenté a una serie de dificultades con las que no contaba y que se fueron solucionando en el camino.
La novela se desarrolla en San Francisco, ¿qué tanto investigó el medio ambiente de esa ciudad para escribir este libro?
Lo hice, aunque superficialmente. Pasé por algunos sitios que relato en el texto, hay unos por supuesto muy duros, a los que uno entra para hacer determinada actividad… Creo que era indispensable reflejar ese mundo, no se puede prescindir de este aspecto de San Francisco como la ciudad misma: los gays, travestís, prostitutas, etc. Creo que en la novela hay más imaginación que otra cosa. El lector se dará cuenta de por qué digo esto. El enigma, para resolverse, no necesita de mucha perspicacia, por parte del detective de la novela, ni tampoco el lector. Lo que sucede es que si hubo investigación, fue en torno a San Francisco como ciudad. En aquel entonces el cónsul mexicano era Javier Aguilar. Él me proporcionó una información muy amplia sobre detalles que eran necesarios para la obra. Por ejemplo: ¿cuál es la ley que en California rige para arrastrar a alguien durante determinado tiempo? Yo no sabía si se aplicaba la cámara de gas o la silla eléctrica. Detalles que eran indispensables para aplicarlos dentro de cualquier texto literario bien fundamentado. En California resulta que los condenados a muerte pueden escoger entre una inyección letal o la cámara de gas. También me interesaba conocer información sobre periódicos, estaciones de televisión y de radio de San Francisco. Hice dos viajes a la ciudad, primero uno de tres días y luego otro de tres semanas. Al inicio había trabajado sobre un plano, que como su nombre lo indica, es plano. Tuve la necesidad de ir allá a ver qué calles subían y qué calles bajaban. Así como digo que el coche del inspector daba vuelta a la derecha, tengo que decir también que subía por la calle, etc. Todos esos elementos en la novela son enriquecedores, ayudan a crear la atmósfera y el ambiente, lo que le proporcionan carne a ese esqueleto de la trama, que en la novela policiaca es inflexible, pues está predeterminado, y uno no se puede salir de él. Hay que darle al lector, en todo caso, la idea de que no existe tal fisura. En cambio en la novela en general todos los escritores sabemos que la obra se va por rumbos que no nos imaginamos nunca. He conocido escritores muy pocos escritores que hagan un plano de la novela y lo siguen al pie de la letra. Uno de ellos era Sergio Galindo, y me parece que esa fue una falla, no se salía de lo establecido.
¿Cuál fue el propósito al enterar al lector desde la primera página que David ha asesinado a su esposa Linda?
En este caso, mi primer antecedente es Un condamné Sâchappe, la película de Bresson, de los años cincuenta. El título mismo anuncia todo: el condenado a muerte se va a escapar. Pero no por eso se pierde el interés. El supuesto está tan logrado que estamos sobre las uñas todo el tiempo viendo esa cinta. En el thriller –a diferencia de la novela policiaca– se sabe quién es el asesino desde el principio. El problema es crear un suspenso que atraiga al lector hasta la última letra del texto.
Retomando un poco la estructura del texto, ¿cómo diseño el plano a seguir para no dejar caer la historia?
Empecé por el principio, cosa muy rara en mí. Lo que hice fue el primer capítulo y posteriormente lo tuve que modificar varias veces a medida que se desarrollaba la novela, que se complicara la trama y que ponía pequeñas trampas para el lector o agregaba dosis de suspenso para que él creyera una cosa distinta a lo que al final de cuando le sucede al protagonista. Siempre lo tuve claro, aunque surgieron nuevos elementos que como ya lo dije modificaron la novela.
¿Por qué no desarrollo Linda 67 en nuestro país como sus anteriores novelas?
Requería una ciudad con un centro pequeño, como se ve casi al final del libro. Pero además, a mí no me funciona mucho mejor la novela policial en un ambiente anglosajón. Será porque la mayor parte de ellas se desarrollan en sitios de esa especie. Y por lo demás, tal vez fue un capricho personal. San Francisco es una ciudad que a mí me encanta, es maravillosa, y es por eso que su escenario me pareció adecuado para el texto.
¿Siguió determinados cánones estéticos para desarrollar cada uno de los capítulos de la novela?
No. Solamente recordaba una de las 28 reglas de Van Dyne que me parecen indispensables para escribir una novela de este tipo, pero siempre quise tener libertad para escribir el libro. De todos modos, aun así, el personaje de alguna manera impuso la forma de renovelar su tragedia, porque yo quería hacer una novela policial y me salió un thriller. Creo que una novela policiaca al estilo clásico es ingenua. Y regreso con Eco en su novela El nombre de la rosa, donde demostró que siempre es posible hacer un soneto sobre la rosa y que los temas son inagotables.
¿Considera usted que Linda 67 se pueda ver en el cine?
A mí me parece muy difícil que eso ocurra porque juego con muchos planos y muchos tiempos; además, no cuento con una mentalidad cinematográfica. No es mi oficio hacer guiones, nunca los he hecho y no quiero meterme en camisa de once varas. Sin embargo, la opinión de otros es diferente: varias personas que leyeron el texto antes de ser publicado, incluyendo a mi editor, creen que esta historia bien podría llevarse al cine.
Nota del editor: Esta entrevista pertenece al libro Crónicas de la memoria de Miguel Ángel Muñoz, de próxima aparición.
Miguel Ángel Muñoz, mexicano, es poeta, historiador y crítico de arte. Su dedicación a la creación artística actual es absoluta; compagina su labor en El Financiero, La Jornada Semanal y en la revista Casa del Tiempo, con la de comisario de exposiciones. Ha trabajado personalmente con muchos artistas; entre ellos, Eduardo Chillida, Rafael Canogar, José Luis Cuevas, Josep Guinovart, Roberto Matta, Antoni Tàpies, Richard Serra, María Girona, Vicente Gandía, Ricardo Martínez, Chema Madoz, Luis Feito, Xavier Grau, Charo Pradas, Ignacio Iturria, Albert Ràfols-Casamada, Robert Rauschenberg y Luoise Bourgeois. Es autor de los libros de ensayo: Yunque de sueños. Doce artistas contemporáneos (Editorial Praxis, 1999), Ricardo Martínez: una poética de la figura (CONACULTA, 2001), La imaginación del instante: signos de José Luis Cuevas (Editorial Praxis, 2001), El espacio invisible. Una vuelta al arte contemporáneo (Ediciones Batarro, Málaga, España, 2004), Convergencia y contratiempo (Plan C Editores- CONACULTA, 2008), Espacio, superficie y sustancia. La obra de Ricardo Martínez (Siglo XXI Editores, 2009) El espacio vacío, (CONACULTA, 2009), Gutiierre Tibón. Lo extraño y lo maravilloso (CONACULTA, 2009). Asimismo ha editado y comentado los libros El asombro de la mirada. Convergencia de textos. (Editorial Síntesis, Madrid, España, 2010) Espejismo y realidad. Divergencias estéticas de Rafael Canogar (Editorial Síntesis, Madrid, España, 2011) y Elogio del espacio. Apreciaciones sobre arte de Rubén Bonifaz Nuño (UNAM, El Colegio Nacional y UAM, México 2012). Además, es autor de los libros de poesía El origen de la niebla (CONACULTA, 2005), Espacio y luz (Centro de Producción Gráfica, México, 2003) con serigrafías originales de Albert Ràfols-Casamada, Convergencia (Centro de Producción Gráfica, México, 2003) y Travesías (Centro de Producción Gráfica, México,2004) con serigrafías originales de José Luis Cuevas, Cinco espacios para Rafael Canogar (Ediciones El Taller, Madrid, España, 2004), con grabados originales de Rafael Canogar y Fuego de círculos (Editorial Praxis, México 2012). Sus textos se publican en diversas publicaciones de México, España y América Latina. Es director de la revista literaria Tinta Seca. Es colaborador, asimismo, de las revistas Metérika (Costa Rica), Banda Hispánica y Agulha (Brasil). Actualmente se está capacitando como doctor en Historia del Arte por la Universidad Nacional Autónoma de México. Es Miembro Asociado del Seminario de Cultura Mexicana. En 2009, fue reconocido por la Universidad Autónoma de Santo Domingo, República Dominicana y la Facultad de Artes por su “contribución al estudio del Arte Contemporáneo”.