En el desvelo de todos los santos
Algo sobre la práctica de la papiroflexia
Tomo este lenguaje
y –con dolor, pasión y constancia–
voy formando figuras nuevas, inéditas, pulcras,
y las dejo libres…
En la oscuridad
busco que estas palabras
se dilaten en el interior de los hombres,
como aquellas flores misteriosas
que al posarse en el agua van desplegándose hacia la hondura
hasta encontrar
su reflejo.
Esto es sólo un ademán de la voz
que cobra forma.
Resonancias
Los antiguos creían que el mundo era lenguaje
que todo estaba unido por secretas relaciones
y en el libro de la vida los objetos más disímiles
se llamaban unos a otros
con urgencia.
Creían que todo guardaba dentro de sí
secretas resonancias de lo otro.
Por eso aún creo que todas
las cosas del mundo mimetizan a otras cosas,
y en el deseo oblicuo de la diferencia
mi cuerpo es el anverso de tu cuerpo,
mi tacto en tu tacto es la mitad de ti que desconoces;
la chispa de un dios que se me oculta
en el negativo voluptuoso de tu forma.
Por eso creo
que el amor es la comunión entre la fruta y la boca
que se llaman secreta,
mutuamente.
Destellos
Existe un lenguaje oculto entre nosotros
que da un matiz distinto a palabras y a cosas.
Cuando digo: toma esta fruta,
la fruta se abre y destella entre los dos;
y si observamos por las tardes
al maullido de los gatos formar arabescos en el aire
lo sabemos todo.
Cuando nuestros cuerpos se abren plenamente en el ocaso
un fuego oculto nos ilumina.
Por eso sé
que existe un lenguaje oculto entre nosotros
que da un matiz distinto a palabras y a cosas.
Adrián Soto, mexicano, es poeta, ensayista y traductor. Ha publicado la biografía Quetzalcóatl, la efigie de luz (EMU) y el prólogo al ensayo La Cristiandad o Europa de Novalis (UNAM); además de ensayos, poemas y traducciones en las revistas Hotel, Aeda Lamm, Aion, Literalgia, Quehacer editorial, Punto en Línea y el Periódico de Poesía de la UNAM.